Sin dudas que debatir o hablar de adopción es sumergirse en uno de los ámbitos más complejos y misteriosos de la sociedad. El tiempo que una pareja demora en localizar a un niño, la cantidad de trámites que conlleva, más las recientes (y poco ventajosas) modificaciones en la Ley que la regula, no hacen más que facilitar los medios para el acceso a una oportuna, rápida y segura adopción ilegal.
En el 2005 el gobierno del presidente Néstor Kirchner sancionó la Ley Nº 25.854 que crea el registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos, con el objetivo de agilizar y dar mayor transparencia a la cuestión. Sin embargo tanto en Rosario como en toda nuestra provincia, existe un Registro propio para cada localidad, por lo que sólo pueden “tramitarse” chicos del ámbito local.
Pero eso no es todo ya que a la Ley se le suma una nueva forma de adopción: la Entrega Directa de una madre que quiere ceder la Patria Potestad de su hijo a una familia.
La encargada de la Secretaría Social del Juzgado de Menores Nº 4 de Rosario, Estela Berretone, explicó: “Esa Ley quitó la posibilidad de adopción”. Claro está que es uno de los ejes principales en la negociación y tráfico de menores.
Una mamá adoptiva de mellizos aseguró que por internet existen páginas provenientes de Salta, Jujuy y Catamarca, donde se ponen una lista con color de piel, de ojos y pelo, para que cada padre pueda elegir. “Ahí te hacen ven un catálogo de chicos”, argumentó, sentenciando que “cuando uno empieza a caminar el tema de adopción, le piden plata de todos lados”. Además aseguro que “es de público conocimiento que hay listas en los hospitales y que las manejan enfermeras, quienes ponen un costo”.
Sin embargo, se supone que no solamente están involucrados padres que quieren lucrar con sus hijos. También, las versiones apuntan a jueces y abogados. “Conozco personas que pagaron entre 10 mil y 20 mil pesos a un abogado por una criatura. Ellos vienen hacia a vos, te tiran una cifra y te consiguen el chico”, aseguró el padre adoptivo de cuatro hermanitos entrerrianos.
Pero además, y es de público conocimiento, que hay cientos de niños alojados en los diversos Hogares de Tránsito, o del Huérfano aquí en Rosario. Sin embargo la pregunta es: ¿Cómo es posible que haya tantas criaturas abandonadas y que no se les de la posibilidad de reubicarlos en alguna familia, teniendo en cuenta la gran demanda en los Juzgados?. Todos los padres coincidieron en que el dejar a sus hijos en esos lugares les otorga el beneficio económico del famoso Plan Trabajar que regala la Nación.
Y quizás otra de las dificultades pasa porque la mayoría de los padres en lista de espera aguardan la llegada de un bebé. Muy pocos se atreven a hacerse cargo de algún chico mayor a tres años. Berretone señaló que de 700 familias anotadas hoy, son extremadamente escasas las que señalaron que, dado el caso, se harían cargo de chicos grandes pero que al momento de la verdad “no buscan que tengan más de tres añitos”.
En otras localidades del país ocurre lo mismo. Hace algún tiempo, salió publicada en Clarín una nota en la que se explicaba que más de mil chicos adoptables de entre 2 y 16 años no podían ser ubicados.
Evidentemente el método y la regulación complejizan la tramitación para obtener la crianza de un nene abandonado. Aquí se pone en juego la doble necesidad: en parte la de una pareja deseante de brindar contención, amor y protección, y por otro lado la de un chico con esas mismas carencias y ganas de hacerlo. Pero las manos negras del negocio salen al acecho y solo resta sentarse esperar o caminar agarrado de ella.
* Antonella Mari
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ENTREVISTAS REALIZADAS
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